El Sistema A-0 fue escrito por Grace Hopper en 1951 y 1952 para UNIVAC I. Fue el primer compilador desarrollado para una computadora electrónica. El A-0 funcionaba más como un cargador o enlazador que como la noción moderna de compilador. Un programa era especificado como una secuencia de subrutinas y argumentos. Las subrutinas eran identificadas por un código numérico y los argumentos de las subrutinas eran escritas directamente después de cada código de subrutinas. El sistema A-0 convertía la especificación en código máquina que podía ser alimentado a una computadora para ejecutar el programa.