Es una de las tres obras de Alexander Calder de las que dispone la fundación, junto con Corcovado, que se encuentra dentro del museo y fue una donación de Josep Lluís Sert, y Fuente de Mercurio, instalada originalmente en el pabellón de la República Española durante la Exposición Internacional de París de 1937, que el propio Calder dio (como también 4 alas) a la Fundación como testigo de su amistad con Joan Miró.[1]
La obra consiste en cuatro placas de acero curvadas pintadas de rojo dispuestas talmente que tres de ellas tocan el suelo y soportan una base sobre la que se levanta la cuarta placa. De contornos redondeados, las placas tienen formas de hojas alargadas, evocando las alas que dan nombre a la obra.
La obra mide 3,54 metros de altura por 3,20 metros de ancho y 5 metros de largo.[1]