Zona de protección: 1,20 ha. Zona de respeto: 502 ha.
El Caballero de Madara es una figura esculpida en un peñasco de 100 metros de altura, que representa un jinete vencedor de un león. Recibe su nombre de la cercana aldea de Madara, situada al noreste de Bulgaria. Madara fue el lugar sagrado más importante del primer Imperio Búlgaro, antes de la conversión de este país al cristianismo en el siglo IX. Las inscripciones que acompañan la escultura relatan acontecimientos ocurridos entre los años 705 y 813 d.C. (UNESCO/BPI)[3]
Zona de protección: 0,68 ha. Zona de respeto: 14 ha.
Emplazada en las afueras de Sofía, la iglesia de Boyana comprende tres edificios. La iglesia de la parte oriental, fue construida en el siglo X. A mediados del siglo XIII, el sebastocrator Kaloyan ordenó que se agrandara la iglesia primigenia y se construyese otra de dos plantas junto a ella. Los frescos de esta segunda iglesia, pintados en 1259, constituyen uno de los más valiosos conjuntos de la pintura medieval. A comienzos del siglo XIX se edificó una tercera iglesia, ultimándose así la configuración definitiva del sitio, que es uno de los monumentos más completos y mejor conservados del arte medieval de Europa Oriental. (UNESCO/BPI)[4]
Este conjunto de iglesias, capillas, celdas y monasterios rupestres se fue formando a lo largo del tiempo en el valle del río Russenski Lom, no lejos de la aldea de Ivanovo, al noreste de Bulgaria. Fue en el siglo XII cuando los primeros eremitas excavaron sus celdas e iglesias en la roca. Los frescos, que datan del siglo XIV, atestiguan la técnica excepcional característica de la escuela de pintura de Tarnovo. (UNESCO/BPI)[5]
Zona de protección: 0,02 ha. Zona de respeto: 7,09 ha.
Descubierta en 1944, esta tumba data del periodo helenístico (hacia finales del siglo IV a.C.). Está situada cerca de Seutópolis, capital del rey tracio Seutes III, y forma parte de una gran necrópolis. El tholos comprende un corredor angosto y una cámara mortuoria circular con frescos que representan ritos funerarios. Estas pinturas son las obras de arte del período helenístico mejor conservadas en Bulgaria. (UNESCO/BPI)[6]
Zona de protección: 638 ha. Zona de respeto: 673 ha.
La reserva natural de Srebarna está formada por un lago de agua dulce, adyacente al río Danubio, que se extiende por más de 600 hectáreas. Alberga unas 100 especies de aves que vienen aquí a reproducirse, muchas de las cuales son raras o se hallan en peligro de extinción. Otras 80 especies de aves hallan refugio en la reserva cada invierno, en la época de su migración. Entre las más interesantes cabe destacar el pelícano dálmata, la garza gris, el ibis morito y la espátula blanca. (UNESCO/BPI)[7]
Zona de protección: 27 ha. Zona de respeto: 1246 ha.
Edificada en una península rocosa del mar Negro, la tres veces milenaria ciudad de Nessebar fue, en sus orígenes, un asentamiento tracio llamado Menobria. A comienzos del siglo VI a.C. se convirtió en una colonia griega. Sus vestigios arqueológicos datan esencialmente del periodo helenístico y comprenden la acrópolis, el ágora, un templo dedicado a Apolo y una muralla tracia. La basílica de Stara Mitropolia y la fortaleza son de la Edad Media, época en la que Nessebar era una de las ciudades bizantinas más importantes de la costa occidental del Mar Negro. Sus casas de madera, construidas en el siglo XIX, son representativas de la arquitectura de esta época en la región del Mar Negro. (UNESCO/BPI)[8]
Zona de protección: 11 ha. Zona de respeto: 1290 ha.
Este monasterio fue fundado en el siglo X por San Juan de Rila, un eremita canonizado por la Iglesia Ortodoxa. Su austera morada y su tumba se convirtieron con el tiempo en lugares sagrados, donde se creó un conjunto monástico que desempeñó un importante papel en la vida espiritual y social de la Bulgaria medieval. Destruido por un incendio, a comienzos del siglo XIX, el conjunto fue totalmente reconstruido entre 1834 y 1862. Este monumento ejemplar del Renacimiento Búlgaro (siglos XVIII y XIX) simboliza la toma de conciencia de una identidad cultural eslava después de siglos de ocupación. (UNESCO/BPI)[9]
Zona de protección: 38350 ha. Zona de respeto: 1078 ha.
Situado en el macizo montañoso de Pirin, al sudoeste de Bulgaria, este parque se extiende por más de 27.400 hectáreas, a una altitud que oscila entre 1.008 y 2.914 metros. Su paisaje es típico de las zonas kársticas de los Balcanes, con sus lagos, cascadas, grutas y bosques de coníferas. El sitio se inscribió en la Lista del Patrimonio Mundial en 1983 y con su extensión actual abarca ahora unas 40.000 hectáreas de los montes de Pirin, esto es, la totalidad del parque nacional, exceptuadas dos zonas turísticas dedicadas al esquí. La zona añadida es en su mayor parte un macizo montañoso con praderas alpinas, desprendimientos rocosos y picos que culminan a más de 2.000 metros de altura. (UNESCO/BPI)[10]
Descubierta en 1982, cerca de la aldea de Svestari, esta tumba del siglo III a.C. es representativa de los principios esenciales aplicados por los tracios en la construcción de sus edificios religiosos. La ornamentación arquitectónica de la sepultura es única, con sus frescos y sus diez cariátides polícromas, mitad mujeres y mitad plantas. Estas diez figuras femeninas esculpidas en altorrelieve en la cámara central, así como la decoración de la luneta de la bóveda, son los únicos ejemplos artísticos de este tipo encontrados hasta ahora en el antiguo territorio tracio. La tumba es un testimonio excepcional de la cultura de los getas, pueblo tracio que estuvo en contacto con el mundo helénico y el hiperbóreo, según los geógrafos de la Antigüedad. (UNESCO/BPI)[11]
Zona de protección: 58.353,04 ha. Zona de respeto: 191.413,09 ha.
Esta extensión transfronteriza del bien Patrimonio Mundial de los Hayedos Primarios de los Cárpatos y Antiguos Bosques de Hayedos de Alemania (Alemania, Eslovaquia y Ucrania) abarca 12 países. Desde el fin de la última Edad de Hielo, los hayedos europeos se esparcieron desde unos pocos refugios aislados en los Alpes, los Cárpatos, el Mediterráneo y los Pirineos por un corto periodo de unos pocos miles de años en un procesos que aún perdura. Esta exitosa expansión está relacionada con la flexibilidad de los árboles y la tolerancia a diferentes condiciones climáticas, geográficas y físicas. (UNESCO/BPI)[12]
Bien inmaterial inscrito en 2008 (originalmente proclamado en 2005).[13]
Las danzas y los cantos polifónicos de la región de Shoplouk, en Bulgaria, siguen siendo interpretados por un grupo de ancianas, las Babi de Bistritsa. Esta tradición incluye la diafonía, conocida con el nombre de polifonía shoppe, antiguas formas del baile en cadena horo, y la práctica ritual del lazarouvane, una ceremonia de iniciación para las muchachas.
La diafonía es un tipo específico de canto polifónico en el que una o dos voces construyen la melodía compuesta de izvikva, (grito, llamada), y del bouchi krivo, (rugido), mientras que otros cantantes mantienen un bordón monotónico que se duplica o se triplica para producir un sonido más fuerte. Las bailarinas, vestidas con trajes tradicionales, se mantienen unidas agarrándose por el cinturón o la cintura y bailan en círculo, con pasos ligeros y moviéndose en el sentido contrario a las agujas del reloj. Dentro de esta estructura se realiza un cierto número de variaciones, dependiendo de la canción y de la práctica ritual.
La función social del canto polifónico ha cambiado a lo largo del siglo XX, pues ahora se representa sobre todo en una escena. Sin embargo, las Babi de Bistritsa son consideradas como un componente importante de la vida cultural de la región, transmitiendo expresiones culturales tradicionales a las generaciones más jóvenes. Estas mujeres figuran entre los pocos representantes que quedan de la polifonía tradicional y el pueblo de Bistritsa es una de las últimas zonas de Bulgaria donde esta expresión cultural se ha mantenido durante siglos.
La proximidad de la capital Sofía, donde se ofrece gran variedad de atracciones culturales, hace que los jóvenes pierdan el interés por las tradiciones basadas en la comunidad. A lo largo de los años, se ha reducido el rico repertorio de cantos y bailes, incluyendo ahora solamente sus aspectos más populares para ser representados en escena. (UNESCO/BPI)
El nestinarstvo, mensajes del pasado: “Panagyr” de San Constantino y Santa Elena en la aldea de Bulgari
El nestinarstvo, rito de la danza del fuego, es el momento culminante del Panagyr, la conmemoración anual de las fiestas religiosas de San Constantino y Santa Elena (3 y 4 de junio) que se celebra en la aldea de Bulgari, situada al sudeste de Bulgaria, en la región del Monte Strandzha. Esta festividad ritual tiene por objeto aportar a los aldeanos bienestar y fecundidad. Por la mañana se celebran ritos y oficios religiosos, así como una procesión en la que los iconos de ambos santos son llevados, al son de tambores y gaitas, hasta un manantial de agua sagrada situado en las afueras del pueblo. Una vez en el manantial, se distribuyen entre todos los presentes agua bendita y cirios para que gocen de buena salud. El apogeo de la fiesta tiene lugar por la noche con la ejecución de una danza del fuego, expresión máxima de la veneración profesada a los dos santos. Al son del tambor sagrado la asistencia se agrupa silenciosamente, formando un círculo en torno a los rescoldos incandescentes de una hoguera. Luego, los nestinari, líderes físicos y espirituales por intermedio de los cuales se expresa la voluntad de los santos, van entrando uno tras otro en el círculo y empiezan a caminar sobre las brasas. Practicado en otros tiempos en unos treinta pueblos vecinos de Grecia y Bulgaria, el rito del nestinarstvo sólo perdura en Bulgari. Aunque esta aldea sólo está poblada por un centenar de habitantes, durante la conmemoración del Panagyr acoge a miles de personas que acuden a participar en las festividades rituales. En los últimos años, muchos griegos vienen a sumarse a las celebraciones. (UNESCO/BPI)
Los kilims de Chiprovtsi son alfombras tejidas a mano por mujeres de esta ciudad del nordeste de Bulgaria. Casi todos los hogares de Chiprovtsi poseen telares verticales manuales que las mujeres utilizan para confeccionar tapices reversibles con los que tradicionalmente se cubren los suelos. Las tejedoras cogen con la mano izquierda varios hilos de la urdimbre, cruzan el hilo de la trama en ésta y utilizan un batiente pequeño para apretarlo. Los hombres de esta ciudad se suelen ocupar de la producción, tratamiento y tinte de la lana. Los hilos teñidos con pigmentos naturales dan a los tapices tonos de color pastel, mientras que los colorantes químicos da tonos más vivos. Los kilims de Chiprovtsi son reputados por su composición y sus motivos ornamentales y colores. Su confección va unida a serie de creencias, fórmulas verbales y prácticas rituales. Las tejedoras rezan y formulan votos por el éxito de su trabajo antes de empezar un nuevo tapiz. También cantan y narran relatos cuando trabajan en el telar. Los conocimientos y técnicas de fabricación las transmiten las abuelas y madres a sus nietas e hijas, en particular con motivo del trabajo colectivo que es necesario realizar cuando se tejen tapices de grandes dimensiones El tejido de los kilims está profundamente arraigado en la vida social y cultural de la población. Los motivos ornamentales más conocidos se reproducen en toda la comunidad y representan incluso el escudo de la ciudad. (UNESCO/BPI)
El artículo 18 de la convención de la Unesco de 2003 estipula que el comité intergubernamental selecciona periódicamente entre las propuestas presentadas por los estados partes, programas, proyectos y actividades de salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial que reflejen mejor los principios y objetivos de la convención. Noruega cuenta con un proyecto entre las mejores prácticas de salvaguardia bajo la denominación de Sistema de prácticas de representación y transmisión del patrimonio cultural: el Festival Folclórico de Koprivshtitsa[16], seleccionado en 2016.
La inscripción en esta lista es la primera etapa para cualquier futura candidatura. Bulgaria, cuya lista indicativa fue revisada por última vez el 29 de enero de 2018, tiene presentado los siguientes 16 sitios:[17]