Se llama arneses[1] al conjunto de adornos, hebillas o arreos que se pone a los caballos de montar y a las caballerías de tiro y de carga.
También se llama así al cuarto destinado a guardar los arneses de las caballerizas, denominándose el del palacio real guadarnés.
Antiguamente, se distinguían los siguientes tipos de arneses:
- Arnés de seguir. El que servía para combatir con lanza.
- Arnés tranzado. El que estaba atado con trenzas de cordones o recortado por alguna parte.
Historia
En el siglo IV a. C., aproximadamente, aparece un yugo colocado en el pecho de un caballo con unas correas que lo unen a las varas de un carro. Los chinos sustituyeron el yugo rígido por una tira de cuero («arnés de tirante»). De esta manera el peso de la carga descansaba sobre el pecho y las clavículas del animal. Hacia el siglo VIII el arnés de tirante llegó a Occidente.[2]
Véase también
Referencias
- ↑ Real Academia Española. «arnés». Diccionario de la lengua española (23.ª edición). Consultado el 10 de agosto de 2024.
- ↑ Temple, Robert K. G. (octubre de 1988). «Inventos y hallazgos de una antigua civilización». El Correo. Consultado el 25 de noviembre de 2012.
- El contenido de este artículo incorpora material del Diccionario enciclopédico Gaspar y Roig, de 1870, el cual se encuentra en el dominio público.