En el Reino Unido, la condición de
ciudad (del
inglés:
city) es concedida por el monarca británico a un grupo selecto de comunidades y no otorga ningún derecho especial salvo el prestigio de denominarse así. Tradicionalmente, se otorgó en Inglaterra y Gales a las localidades con catedrales diocesanas, aunque en el siglo XX fueron otros los criterios, como el tamaño de la población o el reconocimiento de especiales ocasiones, como el
Millennium o el
Jubileo de Diamante de Isabel II.
En enero de 2014, eran 51 las ciudades inglesas oficialmente designadas y 69 las británicas. (Véase una lista completa en:
Estatus de ciudad en el Reino Unido).