El finiquito es un documento que existe entre una empresa y un trabajador, en el cual el trabajador es liberado de trabajar pero la empresa le tiene que pagar una cantidad de dinero. Siempre y cuando el trabajador estaba en un puesto fijo.
Secciones
El finiquito es un documento que pone fin de forma oficial toda relación laboral entre empleado y empleador de manera que, tanto el empresario como el trabajador, son libres de las obligaciones contractuales a partir de la fecha, como son la de abonar el sueldo por parte del empresario y la de trabajar a las órdenes de éste por parte del trabajador.[1]
En el finiquito se plasma la propuesta de liquidación de las cantidades adecuadas por el empresario al trabajador con motivo de la extinción del contrato de trabajo, por mutuo acuerdo, despido, dimisión del trabajador o jubilación, entre otras causas establecidas en el artículo 49 del Estatuto de los Trabajadores[2] y se divide en diversos apartados o secciones:
Identificación
Recoge los datos identificativos de las partes presentes en el finiquito. Por un lado los datos de la empresa, con su correspondiente número fiscal. Y por el otro, los datos del empleado con su número de afiliación a la Seguridad social, y número de identificación fiscal procesal.
Devengos
En este apartado se recogen todos los conceptos por los que el trabajador debe percibir dinero. Entre ellos están los días de sueldo no abonados, la indemnización, las partes proporcionales de las pagas extras, o los días de vacaciones no disfrutados. Tendrán derecho a la indemnización por despido todos los trabajadores que hayan sido objeto de un despido disciplinario y se calculará atendiendo a los días que correspondan por año trabajo y al límite máximo permitido, según el salario diario.[3]
Deducciones
Frente a los devengos, enumera los conceptos por los que al trabajador se le retiene o retira dinero. Entre ellos el incumplimiento del preaviso marcado en convenio, los anticipos concedidos, o las cantidades correspondientes a la retención fiscal, si procede. Las indemnizaciones por despido quedarán exentas de dicha retención.
Liquidación y firma
Se confrontan devengos y deducciones, obteniendo la cantidad a cobrar por el trabajador. Dicha cantidad no podrá ser nunca negativa. Esta cantidad deberá abonarse en el momento de la firma, bien en efectivo o talón bancario. En el momento de la firma el trabajador puede rechazar cualquier pago que pudiera corresponderle si no está de acuerdo con su cálculo, no firmando el finiquito, y puede solicitar la presencia de un representante legal de los trabajadores. Si decide firmar el finiquito, mediante el añadido "recibido no conforme" deja la puerta abierta a posibles reclamaciones de cantidad futuras. Hay que aclarar que la firma del finiquito no presupone la conformidad con el despido, sino la conformidad con la liquidación realizada por la empresa.
Para reclamar las cantidades adeudadas por la empresa, cuando esta no las pone a disposición del trabajador o éste no está de acuerdo con las calculadas, debe proceder a interponer una papeleta de conciliación en el Servicio de Conciliación, Mediación y Arbitraje,[4] antes de poder acudir a la vía judicial.
Véase también
Referencias
- ↑ «Finiquito». Consultado el 14 de mayo de 2019. «Qué es el finiquito».
- ↑ «Extinción de contratos». Consultado el 12 de mayo de 2014. «Estatuto de los Trabajadores (ET)».
- ↑ «Finiquito». Archivado desde el original el 24 de agosto de 2013. Consultado el 21 de agosto de 2013. «Conceptos que debe incluir la empresa para calcular el finiquito del trabajador».
- ↑ «Papeleta de conciliación». Consultado el 21 de abril de 2014. «Trámites ante el Servicio de Conciliación, Mediación y Arbitraje (SMAC)».
Bibliografía
- Ortega Figueiral, Eduardo (2008). Todo Contratación Laboral 2008. Todo (12 edición). CISS. p. 76. ISBN 9788482356976.