El guilloché (guilloche) es una técnica decorativa de grabado en la cual un patrón de diseño repetitivo y complejo es grabado mecánicamente en un material subyacente con gran precisión y detalle.
Técnica
Específicamente, comprende una serie de técnicas de torneado mecánico, llamadas guilloché en francés, en referencia al ingeniero francés “Guillot”, que inventó la máquina “que podía grabar patrones y diseños precisos en superficies metálicas”.[cita requerida] La máquina mejoraba sustancialmente el proceso frente a los tediosos procesos manuales de grabado, permitiendo más delicadeza y precisión, así como velocidad. Otras fuentes vinculan este método a Hans Schwanhardt (- 1621) y su difusión a su yerno Jacob Heppner (1645).[cita requerida]
En arquitectura
Un guilloche es un patrón arquitectónico repetitivo utilizado en la Grecia y Roma clásicas, y en la arquitectura neoclásica así como en los trabajos sobre piedra del cosmatesco medieval, consistente en dos ribetes enrollados alrededor de una serie de puntos centrales. Estos puntos centrales están a menudo vacíos, si bien pueden contener alguna figura, como una rosa. Guilloche es una precursora del guilloché, llamado así porque los motivos resultantes de la aplicación de esta técnica recuerda a los del guilloche.
En numismática
En numismática se emplea en el diseño y fabricación de billetes de banco, así como en títulos oficiales y sellos postales.