La linfografía es un medio de diagnóstico que consiste en la obtención de imágenes radiológicas de los ganglios y vasos linfáticos que se deseen estudiar mediante el empleo de una fuente emisora de radiación ionizante (rayos X), una fluoroscopia o una fuente emisora de radiación ionizante continua. Se necesita también un medio de contraste yodado, un monitor y un ordenador.