En el hinduismo, maia o maya es la ilusión, una imagen ilusoria o irreal, representado como un concepto, estado mental o entidad. Más concretamente en el hinduismo se suele considerar que la realidad o todo el universo de apariencias fenoménicas y que se presentan como existentes son realmente ilusorias, es decir, hacen el "tejido" de maya; y que, por ende, por ejemplo, los seres humanos solemos tener karma al quedar, muchas veces gozosamente, atrapados en maya.
Etimología
- māyā, en el sistema AITS (alfabeto internacional para la transliteración del sánscrito).
- माया, en escritura devanagari del sánscrito.
- Pronunciación: /maiá/.[1]
- Etimología: ‘no es’
- mā: ‘no’;[1]
- aiā: ‘es’.[cita requerida]
En idioma protoindoiranio māiā es cognado del avéstico māiā, que significa ‘fuerza milagrosa’, ya sea desde la raíz mai- (‘intercambio’) o de la raíz mā- (‘medida’).[2][3]
Definición según varias doctrinas
En el hinduismo
En el hinduismo más primitivo el concepto de Maya estaba reflejado en el término Indrajala (magia, engaño, fraude), el cual se usó originalmente en lugar del término maya en la antigüedad. Así según este mito, el primer creador de "maya" en el universo sería Indra a través de los reflejos de la Red de Indra que da origen al Indrajala. Posteriormente al perder Indra el protagonismo como deidad principal en el hinduismo, el concepto actual de Maya sería el dominante.
De esta forma Maya nos mantiene dentro del Kamaloka, el reino del deseo o reino de la necesidad del Triloka (el conjunto de los tres reinos de la existencia, que conforman la realidad total del universo dentro de la cosmología hinduista).
Igualmente, se asocia el estado psicológico de estar bajo el "hechizo" (efecto) de lila (el reflejo y/o la expresión del "juego divino" de Brahman y la realidad que emerge de él). Del mismo modo igualmente significaba y/o representa la sabiduría del misterioso poder ilusorio de la voluntad (sankalpa-sakti) que hace que los dioses creen el esplendor de los mundos fenoménicos.[4]
Así el dejarnos engañar por Maya nos impide lograr el Samadhi y alcanzar Moksha.
Según la doctrina advaita
Según la doctrina advaita, Maya nos mantiene en avidya (ignorancia), ya que la multiplicidad de este mundo fenoménico y la diferencia existente entre el individuo (ātmā) y Brahman (Dios, la totalidad) es solo maya (irrealidad): la realidad es que solo está Brahman; conformándose está ilusión a través de las Gunas, las cualidades que se mueven en todo el universo ―denominado prakriti (‘naturaleza’) o maiá (‘ilusión’)― y que abarcan todo lo existente, al nivel físico, emocional y mental; lo que conlleva igualmente a que el individuo, producto de sus vrittis y samskaras, se identifique erróneamente con los Kosha (las "coberturas" del Atman, que se generan al caer en la ilusión de maya).[cita requerida]
Según la doctrina sankhya y vedanta
Según la doctrina sankhya, māyā se identifica y se origina de prakriti (‘materia’) y pradhana (pre-sustancia desconocida, fuente de la materia), y —también según la filosofía vedānta— es la fuente del universo visible.[cita requerida]
Según el shivaísmo
Según la religión de los shivaístas, māyā es uno de los tres pāśas (’nudos’ que atan al alma a este universo material), junto con el karma y el ego.[cita requerida]
De acuerdo al Shivaísmo de Cachemira, el mundo no es descrito como una ilusión propiamente tal (como en las doctrinas advaita vedanta), sino que más bien, la ilusión es la falsa percepción de la existencia de una dualidad entre Bhairava (La consciencia representada en Shiva) y Bhairavi (La energía representada en Shakti).[cita requerida]
En el budismo
Māyā (Mara), según los budistas, es la duplicidad (una de las 24 pasiones negativas menores).[cita requerida]
Personaje histórico
Según la tradición, también la madre de Siddhartha Gautama (Buda) se llama Māyā.[cita requerida]
Equivalencias o similitudes en otras doctrinas
Igualmente en otras culturas podemos encontrar indirectamente similitudes de la presencia de una "ilusión" que nos oculta la verdadera realidad o esencia de todo.
En el Taoísmo podemos encontrar este concepto presente en la ignorancia que no nos permite abandonar la falsa idea de una dualidad aparente entre los opuestos (yin y yang) en el universo y las cosas presentes en él. Ello no nos permite ver la verdad de la presencia del Tao en todas las cosas y seres, y que todo en el universo está interconectado; siendo esta dualidad de los opuestos en realidad una ilusión. Esta perspectiva sugiere que la dualidad de opuestos como el bien y el mal, el amor y el odio, el ser y el no ser, es solo una ilusión, siendo solo dos caras de una misma moneda; y que en realidad los opuestos no existen de manera aislada y todo está realmente interconectado siendo una unidad.[cita requerida]
En la tradición hebrea de la Cabalá también se puede encontrar un concepto similar en el proceso en el cual Ain (Nada) que pasa a ser Ain Sof (Sin Límites) y luego Ain Sof Aur (Luz sin Límites), hasta llegar a un proceso de Autocontracción denominado Tzimtzum, en el cual este Ser Absoluto que conforma toda la realidad se "anula" así mismo para generar la Ilusión de separación en los individuos que, de esta manera, llegan a ser creados.[cita requerida]
Irrealidad personificada
En el marco de la mitología hindú, Māyā es la personificación de la energía ilusoria māyā (‘ilusión’, materia, en contraposición con el espíritu); que emana del universo creado y mantenido por las deidades de la Trimurti junto a sus respectivas devis.
Maya como la personificación del engaño
La diosa Māiā, según la literatura puránica, es hija de Ánrita (án-ṛita: ‘no-real’, falso, falsedad) y su madre es la diosa Níriti (o la diosa Nikriti). Maia es madre del varón Mritiu (‘muerte’ personificada).[5]
En otras versiones su padre sería Adharma (ateísmo, ‘irreligión’).
Entre los seres que apoyan y/o siguen a Maya destaca igualmente Apasmara, quien representa la ignorancia espiritual y el discurso sin sentido que nos mantiene en Maya.
A Maya también se la identifica a veces con la diosa Durgá u otra diosa principal, como un aspecto de esta que mantiene la "realidad" física.
En cambio, su equivalente Budista (Mara) es asociado a una entidad masculina que cumple la misma función.
La ilusión de las apariencias
En varias religiones hindúes aparecen diferentes significados para Maya. Aun así el significado parece centrarse en el concepto de “Ilusión”. Maya es la deidad principal que manifiesta, perpetúa y gobierna la “ilusión” y el sueño de la dualidad en el universo de los fenómenos. Para algunos místicos esta manifestación es real al estar inmersos en ella. Cada persona u objeto físico, desde la perspectiva de la eternidad, es como una breve y perturbada gota de agua en un océano sin límites. La meta de la autorrealización espiritual (iluminación) es entender esto, sentir intuitivamente la diferencia entre el yo y el universo como una falsa dicotomía; puesto que la idea de que la conciencia y la materia física, o la mente y el cuerpo son cosas diferentes, es el resultado de una no – iluminada perspectiva.
Yogamaya
En el Devi Mahatmyam se dice que la representación del aspecto espiritual de Maya (llamado Yogamaya) cubre los ojos de Vishnú para hacer que él duerma en yoganidra (sueño divino).
Una tradición cuenta que en una ocasión, el dios Brahmā no podía matar a dos demonios, llamados Madhu y Kaitabha, por lo que se vio obligado a dirigirse a Yogamaya para pedirle que despertara a Vishnú. Ella accedió a la petición y entonces Vishnú pudo despertar y procedió a matar a los demonios.
Véase también
- Mara (budismo)
- Apasmara
- Tri-Laksana
- Pasítea, Coalemo y Ápate
- Pseudologos
- Mundo sensible
- Alegoría de la caverna
- Problema mente-cuerpo
- Tierra de cinco minutos
- Avidya
- Klesa
- Kroni
- Principio holográfico del Universo
- Realidad simulada
Referencias
- ↑ a b Véase la entrada māyā́, que se encuentra en el renglón 14 de la primera columna de la pág. 811 en el Sanskrit-English Dictionary del sanscritólogo británico Monier Monier-Williams (1819-1899).
- ↑ Según Manfred Mayrhofer, EWAia (1986-2001), s. v.
- ↑ J. Gonda: «Four studies in the language of the Veda», Disputationes Rheno-Traiectinae (1959), pp. 119ff, 139ff., 155ff., 164ff.
- ↑ Vensus A. George (1 de enero de 2001). Brahmaanubhava. CRVP. p. 86. ISBN 9781565181540.
- ↑ Según varios Puranas, de acuerdo con el Sanskrit-English Dictionary del británico Monier Monier-Williams (1819-1899).