Michael Krasnow | ||
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Información personal | ||
Nacimiento |
27 de abril de 1969 Rochester (Estados Unidos) | |
Fallecimiento |
9 de octubre de 1997 Hollywood (Estados Unidos) | (28 años)|
Causa de muerte | Anorexia nerviosa | |
Nacionalidad | Estadounidense | |
Información profesional | ||
Ocupación | Escritor | |
Michael Krasnow (Rochester, 27 de abril de 1969-9 de octubre de 1997)[1] fue un hombre estadounidense, conocido por su autobiografía My life as a male anorexic (‘mi vida como anoréxico’),[2] que describe su vida con un caso grave de anorexia. Cuando tenía 16 años pesaba 52 kg, después de que se le manifestó la anorexia se mantuvo varios años en 34 kg ―que, con una estatura de 1,75 m, representaba un IMC (índice de masa corporal) de 11,1― y cuando falleció (a los 28 años) pesaba 29 .[1]
Creció en Framingham (Massachusetts); su padre era vendedor y su madre constructora.[1]
En los 14 años que fue anoréxico no bebió ni una sola gota de agua, porque pensaba que iba a ser demasiado fácil vivir sin comer mientras se llenaba el estómago con agua. Para él, beber agua representaba una anulación a su fuerza de voluntad.
Ni siquiera tragaba su propia saliva, sino que la escupía en un vaso o en un papel que llevaba adondequiera que iba. Incluso cuando se acostaba tenía algún recipiente para escupir.
Mientras la mayoría de los anoréxicos procuran comer alimentos bajos en calorías, Krasnow consumía porciones pequeñas de alimentos grasos (como mantequilla de cacahuete) por la misma razón por la que no bebía agua: quería demostrarse que era un anoréxico de primer nivel.[3]
Él esperaba que su libro ayudara a otros varones anoréxicos a comprender y quizá superar la enfermedad.[1]
Referencias
- ↑ a b c d «The hunger artist», artículo de Bob Norman en el diario Broward Palm Beach New Times, del 9 de abril de 1998. Consultado el 4 de septiembre de 2012.
- ↑ Michael Krasnow: My life as a male anorexic (‘mi vida como anoréxico’). Binghamton (Nueva York): Harrington Park Press, 1999. ISBN 0-7890-6029-9.
- ↑
1) He never drank a drop of water in the fourteen years he was anorexic because he thought it would make it too easy to go without food if he was gorging himself on water. To him, drinking water would nullify his power of will.
2) He refused to swallow his own saliva, opting instead to carry a cup or paper towel with him everywhere he went to spit it into. He even kept something to spit into at his bedside while he rested.
3) While most anorexics eat low-calorie foods, Krasnow consumed small portions of fattening foods like peanut butter, for the same reason he didn't drink water -- to show himself that he was a first-rate anorexic.
Bob Norman, en Página 2 de «The hunger artist», artículo de Bob Norman en el diario Broward Palm Beach New Times, del 9 de abril de 1998. Consultado el 4 de septiembre de 2012.