Un ornamento o adorno es un elemento o composición que sirve para embellecer personas o cosas. Es un adorno, compostura o atavío que hace vistosa una cosa.[1]
El variadísimo conjunto de ornamentos utilizados por los artistas para embellecer objetos u obras puede distribuirse en dos clases: simples y/o compuestos. Los primeros consisten en un solo motivo, ya aislado, ya repetido y combinado con otro en serie. Los segundos son una combinación de los elementales.
Los adornos simples se dividen a su vez en:
- caligráficos, cuyos motivos son trazos de escritura;
- geométricos, compuestos por líneas de la geometría; los hay a su vez de dos tipos:
- el de la línea continua;
- el de línea interrumpida o adorno geométrico simplemente dicho;
- orgánicos, que pueden corresponder a seres del reino vegetal o del reino animal y se denominan, respectivamente, fitaria y zodaria.
Los adornos caligráficos tiene aplicación en los códices y en la arquitectura arábiga y sus derivados. En los códices se emplean de muy caprichosas formas, llegándose hasta producir figuras humanas y de animales fantásticos con meros trazos de pluma.
Referencias
- ↑ Real Academia Española. «ornamento». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
- El contenido de este artículo incorpora material de Arqueología y bellas artes de 1920, de Francisco Naval y Ayerbe, que se encuentra en el dominio público.