El neerlandés Kevin Abbring lideró la prueba en los primeros tramos, pero posteriormente abandonó por un problema de refrigeración en su coche por lo que su compañero de equipo Craig Breen heredó el liderato que no abandonó hasta el final de la prueba. En la segunda jornada de la prueba, donde se realizó el cambio de superficie de asfalto a tierra, Breen, Kajetan Kajetanowicz y Bryan Bouffier se encontraban separados por solo quince segundos. El irlandés marcó el mejor tiempo en dos tramos y terminó ganando la prueba con tan solo ocho segundos de ventaja respecto al segundo clasificado, Bouffier, que luego de una dura lucha con Kajetanowicz, logró hacerse con la segunda plaza del podio. En la cuarta posición terminó el finés Esapekka Lappi con el Škoda Fabia S2000 que perdía el liderato del Campeonato de Europa en favor de Craig Breen por solo cuatro puntos.[3]